Kilmar Abrego García fue deportado a El Salvador bajo la presidencia de Trump, a pesar de tener una orden judicial que lo protegía. Esta acción refleja tácticas usadas por los nazis, quienes trasladaban personas fuera de la protección legal del estado. El presidente Nayib Bukele apoyó esta decisión, lo que resalta un peligro similar para la democracia actual. La Corte Suprema de EE.UU. declaró su deportación ilegal, pero el gobierno no cumplió. Este caso muestra el riesgo de que las democracias pierdan su poder cuando no respetan sus propias leyes.
Un migrante deportado por Trump a El Salvador bajo condiciones cuestionables.
Ambas implican trasladar personas fuera de la protección legal del estado.
Apoyó las decisiones de deportación de Trump en el caso de Kilmar Abrego García.
Que las democracias pueden caer si sus instituciones son ignoradas o manipuladas.
Ambas situaciones implican la eliminación de protecciones legales para facilitar grandes violaciones de derechos.
El libro de Timothy Snyder que explica la lógica detrás de los crímenes nazis.
Declaró ilegal su deportación y ordenó su regreso.
El uso de zonas donde los derechos son más difusos y la supervisión judicial es limitada.
Permite abusos de poder y la repetición de tácticas autoritarias.
Deben proteger sus instituciones y límites legales para evitar el abuso de poder.