Los contribuyentes deben al SAT un tercio del gasto público, con créditos fiscales de 2.9 billones de pesos. El 66% de estos créditos están en controversia, lo que significa que los contribuyentes han impugnado el cobro. Estos créditos aumentan por intereses y recargos, y un 21% son factibles de cobro. El SAT intensifica su fiscalización, lo que refleja un rápido aumento de las deudas. Dainzú Patiño, periodista especializada, explica que las deudas también crecen mientras se resuelven las controversias.
Es una deuda que un contribuyente tiene con la autoridad fiscal, pagada en plazos y que genera intereses y recargos.
Representan un tercio del gasto público planeado para el año.
El 66% de los créditos están en controversia.
Son aquellos que están en alguna fase del procedimiento administrativo de ejecución para su cobro.
Aumentan por recargos, intereses y por la falta de pago.
El SAT está llevando a cabo una campaña de fiscalización agresiva.
Es una periodista especializada en impuestos y dinero público.
El 13% de los créditos tienen baja probabilidad de cobro.
Indica un ritmo acelerado en el crecimiento de las deudas.
Significa que el contribuyente ha interpuesto un método de defensa legal contra el cobro.