Para crear un fondo de inversión privado, no necesitas ser millonario. Comienza definiendo el propósito del fondo, como invertir en bienes raíces o acciones. Luego, establece una estructura legal adecuada, como una corporación promotora de inversión. Abre un fideicomiso para gestionar los fondos y estructura la administración del fondo, cobrando comisiones por gestión. Escribe un investment memo para explicar cuánto capital buscas y los riesgos. Lanza la primera ronda de inversión con tu dinero y el de cercanos. Recuerda, los inversores buscan estructura y transparencia, no solo capital.
Es un vehículo que reúne capital de varias personas para invertir en algo rentable.
Decide en qué tipo de activos se invertirá, como capital privado, bienes raíces o acciones.
Una corporación promotora de inversión o una empresa de responsabilidad limitada.
Es el corazón legal del fondo donde se depositan los recursos y se establecen reglas.
El fundador se convierte en administrador, cobrando comisiones por gestión y éxito.
Un documento que explica cuánto capital se busca, los riesgos y derechos de cada inversor.
Se comienza con el propio dinero y el de inversores cercanos para atraer más capital.
Buscan estructura, control, transparencia y visión.
No, se necesita saber cómo estructurarlo y gestionarlo correctamente.
Demostrando resultados y una estructura profesional desde el inicio.


