Los titís y los humanos son únicos entre los primates porque pueden aprender vocalizaciones y usar nombres. Esto se debe a su sistema de crianza cooperativa, donde tanto el padre como la madre, y otros miembros del grupo, ayudan a criar a los gemelos. Este ambiente fomenta la competencia por atención entre los bebés, lo que a su vez favorece el aprendizaje vocal. Nacen con menos comportamientos innatos, lo que permite una mayor capacidad de aprendizaje. Este proceso es similar al de los humanos, que también nacen con cierta inmadurez para adaptarse mejor al entorno.
Los humanos y los titís.
Es un sistema donde padres y otros miembros del grupo ayudan a criar a los bebés.
Es una característica de su tipo de embarazo que afecta el desarrollo del cerebro.
Los bebés que aprenden a vocalizar primero reciben más atención de sus cuidadores.
Nacen con menos desarrollo y más flexibilidad para aprender sobre el entorno.
Ambos nacen con menos comportamientos innatos, favoreciendo el aprendizaje vocal.
El embarazo de gemelos retrasa la formación de órganos, incluido el cerebro.
La competencia por atención en un entorno de crianza cooperativa.
Su capacidad para aprender nuevas vocalizaciones y usar nombres.
Para adaptarse mejor al entorno mediante el aprendizaje.