Este artículo de Tom Morgan explora una revolución silenciosa en la conciencia que desafía a las élites intelectuales. Propone que el mundo está cambiando debido a una falta de conexión entre nuestras mentes. La solución es integrar mejor nuestros hemisferios cerebrales. Se centra en la ciencia de la complejidad y el Taoísmo, que sugieren que debemos encontrar nuestro propio camino en la vida. El autor también especula sobre habilidades especiales que podrían surgir de esta integración, como la telepatía. La idea es que la sociedad podría volverse más cooperativa y menos centrada en el dinero. Algunos críticos podrían ver estas ideas como poco científicas, pero el artículo argumenta que están surgiendo pruebas de que esto es posible. En resumen, la clave es conectar mejor nuestra mente y corazón para entender y mejorar el mundo.
Es un cambio en la conciencia que desafía a las élites intelectuales, impulsado por una integración compleja de los hemisferios cerebrales.
Porque están basadas en un enfoque obsoleto que no considera la integración hemisférica y la conciencia completa.
Es una fuerza que guía a las personas hacia su nicho único en la vida, fomentando la integración y la complejidad.
El Taoísmo promueve la integración como un camino hacia una vida significativa, sintonizándose con el flujo natural del universo.
Es el concepto taoísta de acción sin esfuerzo, logrado a través de la alineación con el Tao y la integración de los hemisferios cerebrales.
Se sugiere que la integración hemisférica podría llevar al desarrollo de habilidades extraordinarias como la telepatía.
Como una inteligencia que trasciende el pensamiento racional, conectándose con el amor y la integración, y capaz de entender el mundo de manera más completa.
Podría llevar a una sociedad más cooperativa y menos centrada en el mercado, con un enfoque en la abundancia y la colaboración.
Algunos podrían considerar la idea como 'woo', o poco científica, debido a su enfoque en la conciencia integrada y los fenómenos místicos.
Es un término para referirse a la apertura de la aceptación de ideas consideradas místicas o poco convencionales.